El exceso de alcohol, tal y como han demostrado infinidad de estudios, es dañino para la salud. Lo que no está claro es qué pasa cuando el consumo de alcohol es ‘leve’ o, ‘moderado’. Investigadores de la Universidad de Cambridge (Reino Unido) podrían tener la solución definitiva a esta cuestión: todo consumo de alcohol, incluso ‘moderado‘ -100 gramos de alcohol puro por semana- acorta la vida. Y Según explica el equipo de investigadores en la revista The Lancet, incluso un consumo por debajo de esa cantidad aumenta el riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares.
Menor esperanza de vida
Para llevar a cabo el estudio, los autores analizaron los historiales clínicos de 600.000 adultos, residentes en 19 países de todo el mundo, que no se calificaban a sí mismos como ‘abstemios’ –es decir, consumían alcohol, si bien las cantidades y frecuencias de consumo variaban de forma de un grupo a otro –. Y lo que hicieron fue fijarse, además de en la ingesta de alcohol, en la edad, el hábito tabáquico, la presencia o ausencia de diabetes, el nivel educativo y la ocupación laboral.
Concretamente, el estudio muestra que un consumo moderado tiene consecuencias nefastas para la salud, pues acorta la esperanza de vida entre uno y dos años, tanto en hombres como mujeres. Además, aumenta el riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares, sin que en este caso se diferencien valores máximos.
Evitar el consumo de alcohol aumenta la esperanza de vida y disminuye el riesgo de enfermedades cardiovasculares graves.
Pero aún hay más. Los autores también analizaron la asociación entre el consumo de alcohol y diferentes tipos de enfermedad cardiovascular. Y según sus resultados, el alcohol se asoció con un mayor riesgo de ictus, insuficiencia cardíaca, aneurismas aórticos fatales e hipertensión arterial o insuficiencia cardíaca con consecuencias mortales.
Como apuntan los autores, «las diferentes relaciones del alcohol con los distintos tipos de enfermedad cardiovascular pueden explicarse porque el alcohol aumenta la presión sanguínea y también el colesterol HDL, conocido como ‘colesterol bueno’. Así, el menor riesgo de infartos no fatales debe considerarse en el contexto de un riesgo incrementado de otras muchas patologías cardiovasculares graves y potencialmente fatales».
Michael Roerecke, de la Universidad de Toronto, quien no participó en el estudio, señaló que el alcohol conlleva muchos peligros para la salud: «Cualquier consumo de alcohol está relacionado con un riesgo (…) Especialmente en mujeres cualquier consumo va unido a un mayor riesgo de padecer cáncer de mama. Muchos no son conscientes de que el riesgo de sufrir cáncer, no solo de mama sino de boca y esófago, es mayor».
Además, estos datos se añaden a informaciones recientes que señalan que los estudios científicos dirigidos a demostrar los beneficios del consumo moderado de alcohol estaban siendo financiados por las grandes compañías licoreras.
Fuente: ABC.es